El pasado 16 de septiembre teníamos la ocasión de escuchar de primera mano las experiencias de algunos de los voluntarios participantes en nuestros proyectos de este año.
Fueron dos horas en las que disfrutamos al máximo de las anécdotas, los detalles y el devenir de cada proyecto. Pero sobre todo disfrutamos de los testimonios de fe vivida a través del arte que nos ofrecieron nuestros voluntarios, de sus caras de ilusión y de su entusiasmo al revivir sus experiencias.
Un año más estamos seguros de que el excelente trabajo que han realizado nuestros chicos dará mucho fruto.